viernes, 29 de marzo de 2013

Ahí esta otra vez, sentada en su terraza, a pesar de que llueva, a pesar de que su único abrigo sea una fina manta.
Sus ojos se dirigen a donde siempre, hacia su ventana, hacía la ventana donde él había vivido meses atrás, esa ventana que había contemplado cientos de noches, mientras él se asomaba y le sonreía. Y ahora su única compañía eran la luna y las estrellas.
La ventana empezaba a acumular polvo, se podía ver su antigua habitación fría, sin muebles, sin nada, sin él en su cama escuchando música o leyendo un libro.
No volvería a ver su pelo rizado, o sus ojos azules cristalinos mirarla cada noche.
La distancia se había apoderado de ellos, pero ella le seguiría amando, en cada kilómetro que los separaba.
Un escalofrío le recorre el cuello, un recuerdo viene a su encuentro.
Recuerda aquel día de Diciembre, las luces de navidad alumbraban la calle, él la miró desde su ventana, era la primera vez que le veía, ¿amor a primera vista? Así fue. Y recuerda el primer día que el abrió su ventana y se coló en la de ella.
Porque al fin y al cabo, los recuerdos jamás se los podía arrebatar nada ni nadie.
                                                                  
Pero saldría adelante, porque eso era lo que hacía siempre

P

sábado, 23 de marzo de 2013

Si tuvieras alas que te elevaran, y la segunda estrella fuera tu guía, encontrarías un lugar donde las estaciones conviven  en armonía, más allá de la pradera del verano, y del bosque del otoño encendido, se extiende una helada tierra, un mundo incomprendido, pero si tienes la mente abierta, y tu corazón necesita saber, tus alas te elevarán más lejos, de lo que jamás pudiste creer.



lunes, 18 de marzo de 2013

¿Hay alguien ahí?

Miras a la derecha, miras a la izquierda, ¿dónde estas?
Quien sabe, eso ya da igual.
Esta nevando, te hundes en la nieve.
Tus huesos se calan.
Ya no puedes ver nada.
Tus labios están morados, tu piel blanca como la sal.
A tú corazón le cuesta seguir, no puedes sentir tus latidos.
Y deseas dormir, y dormir para siempre, dejarse arrastrar por toda la pena.
Caes al suelo, y miras al cielo, el cielo tan negro como tu alma se impone ante ti.
No hay vuelta atrás, con tus últimas fuerzas haces un angelito de nieve, un ángel que no te podrá salvar, ni tampoco lo deseas.
Entonces, tus ojos se cierran, para no volver a abrirse nunca más, pero antes, una frágil y débil sonrisa se dibuja en tu cara.








¿Por que ya no estás?
¿Por qué nunca estuviste?

sábado, 9 de marzo de 2013

Ella daría lo que fuera por rozar sus labios con los de él.
Daría lo que sea por encajar sus labios con los de él, formando una figura perfecta.
Que ambos fueran una joven pareja, que pasean de la mano por las calles de su ciudad.
Que él la llamara a altas horas de la noche solo por escuchar su voz.
A pesar de que él le rompiese el corazón poco le importaba, pero quiere sentir algo real.


lunes, 4 de marzo de 2013

Stay with me.

 Si se propusiese el contar cuantas veces se sorprendió a sí misma pensando en como es el sentir su respiración en su cuello, mientras su piel se eriza, sería casi imposible, tan imposible como desbordar el mar.
Pero aún lo era más el imaginar un mundo sin él, sin escuchar su voz al meterle prisa por la mañana, sin escucharle recordar lo bonita que ella era realmente, sin él, ¿quién iba a ponerle caras extrañas cuando estaba malhumora para hacerla sonreír? ¿Quién la abrazaría por la espalda al son de sus canciones favoritas? Él era irremplazable. Pues con el tiempo él, y solo él, se había convertido en la esencia de ella misma.




─Te quiero- dije

─Te amo- susurró

─Te amo- repetí